Así lo afirmó el sábado 2 de abril el padre José María “Pepe” Di Paola, párroco de San Juan Bosco, en su predicación durante la misa celebrada en la plaza de la estación de José León Suárez, ante cientos de familias y parroquianos que se acercaron a conmemorar los 40 años de la guerra de Malvinas.
En un clima de emoción y participación se desarrollaron las diversas actividades anunciadas: Banda Militar de Regimiento de Artillería Nº1 y la bandera de ceremonia que fue escoltada por el Cuartel de Bomberos de San Martín; Procesión de las ocho Capillas que forman parte de las comunidad parroquial de San Juan Bosco, organizadora de este Encuentro; los ballets de los barrios La Carcova y San Francisco Solano; música folklórica ejecutada por Mario Cabrera, el grupo Los del Milagro y en el cierre, el extraordinario recital del dúo Coplanacu.
Acompañaron personalmente el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, y Lucrecia Cardoso, secretaria de Desarrollo Cultural del Ministerio de Cultura: “Le damos siempre nuestro agradecimiento a los que dieron su vida en las islas, en el crucero Gral. Belgrano… Traigo las palabras de Atahualpa Yupanqui: ‘en nosotros nuestros muertos, pa’ que nadie quede atrás’. El colonialismo es una palabra espantosa: Las Malvinas fueron, son y serán argentinas. Gracias, Pepe, por tu permanente trabajo solidario”, indicó Bauer.