La Policía italiana ha detenido a Carola Rackete, capitana del barco de una ONG alemana con 40 migrantes abordo y que llevaba esperando 17 días en el mar para recibir permiso para atracar. Rackete decidió entrar en el puerto italiano aunque las autoridades italianas se lo habían prohibido.
La capitana del barco de la ONG Sea-Watch 3, Carola Rackete, ha sido detenida este sábado tras atracar sin autorización en el puerto de Lampedusa (Italia) con 40 inmigrantes a bordo.
La mujer, de 31 años y nacionalidad alemana, ha invocado el estado de necesidad tras permanecer 17 días en el mar y anunciar que los pasajeros se encontraban en mal estado físico y psicológico.
Rackete atracó el barco hacia las 01.50 hora local (23.50 GMT) en el muelle comercial y durante la operación chocó contra una patrullera de la Guardia de Finanza (policía financiera y de fronteras italiana) que intentó obstaculizar su entrada, según han informado los medios locales.
Tras ello, la capitana fue arrestada por agentes italianos acusada de “resistencia o violencia contra un buque de guerra”, delito que implica una sentencia de tres a diez años y que podría unirse a la acusación de favorecer la inmigración ilegal por el que estaba siendo investigada.
Arresto domiciliario y sanciones de hasta 50.000 euros
Uno de los asesores legales de Rackete, Leonardo Marino, ha confirmado a Efe que tras pasar la noche en la comisaría se le ha concedido el arresto domiciliario en Lampedusa y está a la espera de que se realicen los interrogatorios en los próximos días.
La capitana se encuentra bajo estrés por todo lo que está ocurriendo y cansada al haber trabajado toda la noche junto a los abogados en el caso, explicaron.
Además de dichas acusaciones, el barco de la ONG será incautado y se le impondrá una sanción de 20.000 euros que aumentará a 50.000 si no se paga en los plazos establecidos, informaron fuentes de Interior.
“Me están investigando y mientras me dicen que no nos ayudarán a que desembarquen los náufragos. Esto quiere decir que estamos aún esperando una solución que no llega. Por eso, hemos decidido entrar en el puerto que ahora esta libre”, explicó la capitana en un vídeo en Twitter antes de entrar en Lampedusa.
“Estamos orgullosos de nuestra capitana, ella hizo exactamente lo correcto. Ella siguió la ley del mar y puso a la gente a salvo. En lugar de ella, (el ministro del Interior italiano) Matteo Salvini debe ser investigado por secuestro y violación del derecho internacional”, dijo por su parte en una nota el presidente de Sea-Watch, Johannes Bayer.
“Yo estoy dispuesto a enfrentar las consecuencias de mis decisiones, tal como se espera de una capitana. ¿Y el señor Salvini?”, preguntó en la nota Rackete.
Esperaba autorización desde el 12 de junio
El barco humanitario, que entró en aguas italianas hace 48 horas, esperaba la autorización para desembarcar a los rescatados desde el pasado 12 de junio, mientras la situación a bordo se agravaba día a día.
Rackete habló del mal estado físico y psicológico de los 40 migrantes que estaban a bordo después de que fueran evacuados por motivos médicos un joven aquejado de fuertes dolores abdominales, y su hermano de 11 años que le acompañaba.
El Gobierno italiano se negaba a autorizar el desembarco de los rescatados mientras no obtuviera un acuerdo con otros países europeos para acogerlos, algo que podría llegar pronto, según dijo el viernes el primer ministro, Giuseppe Conte, desde Osaka, donde asiste a la cumbre del G-20.
🔵 Statement of our Captain, #CarolaRackete, before entering Port with the #SeaWatch3.
“We are proud of our captain, she did exactly the right thing. She upheld the law of the sea and brought people to safety." – #SeaWatch chairman Johannes Bayer pic.twitter.com/lfZ16Pq9F1
— Sea-Watch International (@seawatch_intl) June 29, 2019
