Un camino para recorrer….
¡Sea con ustedes la gracia y la paz de parte del Señor Jesús, Hijo de Dios e Hijo de María!
He titulado este breve documento así: “Un camino para recorrer”; porque es así como estamos viviendo este tiempo sinodal en nuestra Iglesia de Morón. Hay un camino recorrido entre muchas fechas que nos remontan a la historia de esta querida Diócesis, quizá más allá de aquélla primera en 1637, según nos muestra la reseña del pórtico de la Catedral. Sí, un camino recorrido desde entonces, un camino que fue forjando lo que hoy somos nosotros, los caminantes y peregrinos de hoy, un pueblo de hijos, una comunidad de reconciliados por Dios.
Desde siempre, la Madre de Dios, la Inmaculada del Camino, la del Buen Viaje, la Reina de todos los Santos, fue la señal segura de este caminar de tantos que han formado parte de estos queridos parajes de Morón.
Hoy nos toca a nosotros, los de hoy, hacer frente a muchos desafíos pastorales y queremos hacerlo con el lema “caminemos juntos”. Y hemos comenzado a transitar el camino del nuestro primer Sínodo Diocesano. El Sínodo implica una profunda experiencia de comunión y de fraternidad que se construye en el caminar del Pueblo de Dios, actualizando y haciendo visible a la Iglesia como misterio de comunión misionera.
El misterio de la comunión que es la Iglesia tiene su origen en el misterio íntimo de Dios, que es Trinidad, familia, comunidad de hermanos. La comunión trinitaria es, a la vez, unidad y diversidad; Tres Personas, un solo Dios.
La Iglesia, en la medida en que vive la comunión patentiza el misterio íntimo de Dios; comunión – fraternidad apoyada en el misterio de la comunión de los santos.
El Sínodo es construir, en la escucha y el diálogo, la comunión entre todos nosotros, pueblo de Dios; comunión que logramos luego de discernir los desafíos que debemos hacer frente juntos, escrutando los signos de los tiempos.
Ya hemos dado muchos pasos. Ha pasado un año en que anuncié mi decisión de convocar este Sínodo habiendo consultado al Consejo de Presbíteros. Se ha trabajado mucho para llegar a compartir esta primera Asamblea que hemos denominado “de la escucha” con todas las comunidades e instituciones que conforman esta Iglesia de Morón. El Papa Francisco afirma: “una Iglesia sinodal, es una Iglesia de la escucha”. Éste es nuestro momento. Cuando la escucha es auténtica, conduce a la alegría del encuentro.
Es mi deseo entonces que este camino que estamos transitando lo pongamos a la luz del misterio de la comunión de los santos, bajo la intercesión de aquéllos que han sabido caminar con coraje y decisión por las sendas del Evangelio. Ellos son para nosotros los que han llegado a aquélla meta, junto al Creador, al Redentor y al Santificador, al día sin ocaso en el que la humanidad entera entrará en el descanso de Dios.
Por tanto: DECLARO A SAN JOSÉ GABRIEL DEL ROSARIO BROCHERO Y A LA BEATA MARÍA ANTONIA DE LA PAZ Y FIGUEROA, (MAMA ANTULA), COMO PATRONOS DEL PRIMER SÍNODO DIOCESANO DE MORÓN.
Ambos, tan cercanos a nosotros, en su momento y en nuestra Patria, han sabido adelantarse a los tiempos actuales, como nos exhorta nuestro Papa Francisco, a ser una Iglesia en salida, convocando, acercando, escuchando, compartiendo e inundando a sus pasos el Evangelio de Jesús en el corazón de muchísima gente con amor y misericordia. Ellos nos servirán de ejemplo e intercesión para este camino sinodal y, mientras lo vamos transitando, exhorto a que en cada celebración comunitaria o individual, el santo rosario, o en las oraciones que hemos hecho para elevar nuestras súplicas a Dios por el Sínodo, agreguemos al final: “Santo Cura Brochero, ruega por nosotros; Beata Mama Antula, ruega por nosotros.”
Que por la intercesión de la Virgen del Buen Viaje, el Cura Brochero y Mama Antula, Dios bendiga copiosamente a nuestra querida Iglesia de Morón.
En la Sede Episcopal de Morón, a 5 días de Octubre del año del Señor de 2018, Solemnidad de Nuestra Señora del Buen Viaje.
Prot. 04-18/156
Por mandato del Señor Obispo
